El Villarreal CF está siendo una de las sorpresas en LaLiga Santander dentro del aspecto negativo. Tras 10 jornadas transcurridas de campeonato, el equipo castellonense se posiciona 17º, a un punto de descenso y con la sensación de navegar sin rumbo, o incluso a la deriva, mientras no existe una idea de juego clarividente que pueda dar un giro a la delicada tesitura. Además, la figura de Javi Calleja se tambalea al no haber cosechado unos resultados dignos de la exigencia, más que latente, que existe en la entidad villarrealense: la de jugar competición europea temporada tras temporada.
El problema tiene como principal precedente la gestión deportiva del pasado verano. Con la salida de Samu Castillejo, Leo Suárez y Denis Cheryshev el equipo se armó con futbolistas de un perfil idéntico dentro del centro del campo. Que generen, salgan con el balón jugado y creen solidez y consistencia a la medular. El sistema del técnico madrileño así lo exigía, pero carecían de jugadores que, en momentos de duda y bloqueo táctico, consiguieran revolucionar el juego mediante píldoras de clase, verticalidad y desparpajo. Así lo reclamaban partidos como el de la Real Sociedad, Valladolid o Girona.
En la plantilla grogueta habita un futbolista que durante el mercado estival estuvo en la parrilla de salida ante la falta de oportunidades y por el cartel del que presume en ligas como, por ejemplo, la italiana. Ese futbolista es Nicola Sansone
No obstante, en la plantilla grogueta habita un futbolista que durante el mercado estival estuvo en la parrilla de salida ante la falta de oportunidades y por el cartel del que presume en ligas como, por ejemplo, la italiana. Pero una vez finalizado el mercado en la Serie A publicó en sus redes sociales su alegría al quedarse en el Villarreal ya que podía seguir desprendiendo su fútbol en la casa donde ha madurado futbolísticamente. Por lo que, perfectamente, el contexto puede necesitar de unos servicios que, esta temporada, solo han sido empleados durante 7 residuales minutos.
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Nicola Sansone destaca por tener algo especial. Capaz de ser el hombre más peligroso en un equipo y de sacrificar sus virtudes ofensivas para trabajar en defensa cuando se le requiere. Su voraz regate, con una gran capacidad para deshacerse de rivales y con un amplio abanico de recursos, es la seña de identidad de un futbolista que se desenvuelve en la zona de tres-cuartos y al que le gusta partir desde la banda para generar ocasiones individuales de peligro.
Su voraz regate, con una gran capacidad para deshacerse de rivales y con un amplio abanico de recursos, es la seña de identidad de un futbolista que se desenvuelve en la zona de tres-cuartos y al que le gusta partir desde la banda para generar ocasiones individuales de peligro
Teniendo en cuenta que los delanteros del Villarreal tienden a caer a banda o a jugar de espaldas, el italiano puede impulsar su maestría para leer las jugadas de combinación para, en el momento preciso, romper la línea de centrales que le habilite y crear una ocasión para marcar. Además, su destreza para aguantar el esférico en la banda puede estimular la subida de hombres en ataque tanto procedentes del centro del campo como de los laterales que, en su totalidad, son de corte ofensivo (Layún, Mario Gaspar, Jaume Costa y, sobre todo, Alfonso Pedraza).
Encima, cuando ha tenido continuidad, ha cumplido a las mil maravillas. Así lo ratifican sus actuaciones en el Sassuolo y en sus primeras temporadas en el Villarreal, donde, sin ser su principal obligación, anotó una cifra considerable de goles. 30 en 139 choques y muchos de ellos, de bella factura.
En la localidad castellonense buscan soluciones casi inmediatas. Líderes y jugadores puntales que reviertan la dinámica desfavorable en un entorno hostil. Al Villarreal no le faltan, pero, muchas veces, se necesita un cambio radical en muchos aspectos. Por ello y pese a la inactividad, Nicola Sansone puede plantearse como la solución para salir del pozo de la clasificación y volver a pugnar por puestos europeos. Como un recurso de lujo ante la penuria futbolística que vive el Submarino Amarillo.
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