Napoli: Meret; Malcuit (Mertens 45′), Maksimovic, Koulibaly, Hysaj; Callejón (Ounas 78`), Allan, Fabián, Zielinski; Milik (Ospina 27`), Insigne.
Juventus: Szczesny; Cancelo (De Sciglio 61′), Bonucci, Chiellini, Alex Sandro; Bernardeschi (Dybala 85′), Emre Can, Pjanic, Matuidi; Mandzukic (Bentancur 74′), Cristiano Ronaldo.
Goles: 0-1 (Pjanic 28′), 0-2 (Emre Can 39`), 1-2 (Callejón 61′).
- UN ERROR QUE LO CAMBIÓ TODO | Empezó el partido con el Napoli en el último tercio de campo rival, controlando todo amago de transición Juventina y creciendo de la mano de un Piotr Zielinski que hace tiempo que dejó atrás su gris inicio de temporada. Sin embargo, un fallo grosero de Kevin Malcuit cambió las tornas del encuentro. Un mal pase del francés, que vivía su mejor momento desde que aterrizó en Nápoles, dejó vendido a Meret frente a Cristiano y el guardameta italiano acabó expulsado. Ancelotti optó por retirar a Milik del campo y Pjanic no perdonó una falta que para él era un regalo. Cambio de guión radical.
- SE ACABÓ LA RACHA CON KOULIBALY | El tanto del centrocampista bosnio no solo supuso un mazazo para los intereses napolitanos, sino también a una racha que dice mucho de lo bien que está defendiendo el Napoli esta temporada y lo importante que es Koulibaly en ello. Con el central senegalés sobre el campo, la escuadra partenopea no encajaba un gol en Serie A desde el pasado 3 de Diciembre en Bérgamo (Duvan Zpata). Pjanic puso el punto y final.
- EL PROPIO PJANIC DIO VIDA AL CHOQUE | Cuando todo parecía encaminarse hacia una segunda parte difícil de digerir por el contexto del partido (0-2 de la Juventus con superioridad numérica), el jugador nacido en Tuzla, como ya hiciese Meret, también emprendió el camino a vestuarios. Fue la mecha que necesitaba un rival que ya había demostrado cierto orgullo hasta que Emre Can consiguió -hasta este momento- lapidarlo.
- UN NAPOLI CON MUCHA PERSONALIDAD | Pese a que finalmente nadó para morir ahogado en la orilla, importante demostración de carácter la que ofreció el cuadro campano. La expulsión de Pjanic supuso una inyección de fe para un equipo que a partir de ella no dejó de creer. La entrada de Mertens tras el descanso ya supuso una declaración de intenciones que en igualdad numérica fueron más fácil dejar patentes. El Napoli vivió en la frontal bianconera, sometiendo y ahogando a una Juve que vivió gran parte del segundo tiempo demasiado cerca de la portería de Szcesny. Fabián ejerció de director de orquesta y la conexión -marca de la casa- Insigne-Callejón revivió las esperanzas de un equipo que sí quedaría más tocado cuando el propio Insigne erró el penalti que pudo suponer el empate. No consiguió remontar, pero la segunda parte -como comentó Ancelotti en la rueda de prensa posterior al choque- resulta esperanzadora de cara al partido del jueves si las piernas responden.
- LA LIGA INVICTA, CADA VEZ MÁS POSIBLE | San Paolo y el Napoli eran uno de los escollos más duros para la Juventus en lo que resta de Serie A. Lejos de ser un triunfo brillante, lo cierto es que los de Allegri prosiguen su inmaculado recorrido a nivel liguero, con 22 victorias y 4 empates en 26 partidos disputados. Ahora bien, con la vista puesta en remontar en el partido de vuelta de octavos de Champions frente al Atlético, el partido dejó más sombras que luces y evidenció una falta de creatividad y capacidad para quitarse de encima el dominio rival, carencias que han ido poniéndose de manifiesto en el último mes. Una victoria con dos lecturas.
Fuente imagen principal: Francesco Pecoraro / Getty Images Sport.