El Juventus-Milan se enfrió en un instante del partido por la sustitución de Cristiano Ronaldo. El portugués, que venía tocado y que no está en su mejor versión, se marchó sustituido sin llegar a la hora de partido por Dybala y se fue enfadado directo al vestuario. Esto silenció al Juventus Stadium por unos momentos y levantó las críticas de comentaristas como Fabio Capello, quien pidió que hay que advertir al luso por este tipo de comportamientos.
Y para ello, la Juventus ha tomado cartas en el asunto y pretende resolverlo sin hacer mucho ruido, ya que, según La Gazzetta, los dirigentes del club van a reunirse con Cristiano para pedirle que no vuelva a repetir este tipo de comportamientos en público, y le pedirá que se disculpe ante el vestuario para que no se rompa en ningún momento. Veremos si acaba cumpliendo Cristiano.