La política que está adoptando el Milan en su directiva está provocando una revolución en el club. El miércoles los diarios italianos se hicieron eco de que la decisión de Zlatan Ibrahimovic era de no seguir en el Milan, llevan semanas advirtiendo de que la intención de Gazidis es de no tener en plantilla a jugadores que cobren más de tres millones de euros por temporada, Donnarumma cobra seis y Romagnoli 3.5 lo que asoma un difícil escenario en el futuro.
Por ello, la Lazio, según Corriere dello Sport, no ha perdido el tiempo, ya ha contactado con Alessio Romagnoli y las señales de la operación dibujan un terreno fértil para intentar la operación. El central es un viejo anhelo de Tare, director deportivo, y Simone Inzaghi, entrenador de la Lazio. Su llegada sería un salto cualitativo enorme y dotaría a los biancocelesti de la experiencia de uno de los mejores centrales italianos del momento.
Y además este interés nos provoca hacer memoria. Romagnoli salió de la cantera de la Roma y se marchó en 2015 al Milan por 25 millones de euros. Pero cuando el italiano se marchó, posó con la camiseta de la Lazio, lo que abrió una gran polémica, y ha manifestado varias veces su aprecio a dicho equipo.