El Coronavirus ha paralizado el fútbol italiano. Al menos, la mayor parte, sobre todo en el norte. El último partido afectado, el Sampdoria – Hellas Verona de este lunes, un encuentro que, en principio, se jugaría a puerta cerrada por confirmación del Gobierno de Liguria pero que, horas después, fue cancelado y aplazado hasta el 13 de mayo.
Tras esto, Miguel Veloso, jugador del Hellas Verona, denunció en su cuenta de Instagram el trato que están recibiendo por parte de los organismos competentes: «Una semana para decidir si jugar o no. El equipo, el personal técnico, los periodistas… Todos en Génova desde las 17:00h de la tarde sin tener información. Ahora todos en el autobús hacia Verona. Me parece vergonzosa toda esta situación, y una gran falta de respeto por todos los involucrados. En un momento tan delicado e importante para todas las familias italianas, al menos las autoridades podrían evitar decir ser incoherentes y no tratar a las personas y clubes deportivos como si fueran juguetes».