Más lío en Italia. Según múltiples informes en Italia, los agentes Fali Ramadani y Pietro Chiodi están siendo investigados por presunta evasión fiscal y blanqueo de capitales en varios traspasos, incluidos los de Federico Chiesa a la Juventus y Miralem Pjanic al Barcelona.
Ayer, los agentes de la Guardia di Finanza, la Policía Financiera de Italia, llamaron a la puerta de nueve clubes de la Serie A (Inter, Milan, Juventus, Verona, Fiorentina, Napoli, Torino, Cagliari y Roma) y dos de la Serie B (Frosinone y SPAL) para adquirir correos electrónicos y documentos relacionados con las comunicaciones entre ellos y algunos agentes. A día de hoy, los clubes no están bajo investigación, pero podría existir un vínculo entre esta investigación y la denominada Prisma, que involucra a la Juventus por presunta falsa contabilidad y los casos de las plusvalías. La investigación sobre la Juventus la lleva a cabo el Fiscal de Turín, mientras que el Fiscal de Milán coordina la nueva que involucra a Ramadani y Chiodi.
Los investigadores están buscando transacciones sospechosas entre clubes y agentes, centrándose en las comisiones por traspaso, incluidas las de Federico Chiesa de Fiorentina a Juventus y Miralem Pjanic de Juve a Barcelona, ambas completadas en 2020. Los clubes supuestamente depositaron el dinero en cuentas bancarias milanesas pertenecientes a Ramadani. En ese momento, el dinero se transfirió a otras empresas en propiedad del agente que tiene su residencia fiscal en Irlanda. La Fiscalía de Milán cree que estas operaciones supusieron una evasión fiscal de al menos 7 millones de euros por una «organización estable y oculta», como escribió en el decreto de adquisición mostrado por la Guardia di Finanza a los 11 clubes de la Serie A.