Entrevista bomba en Argentina. El ‘Papu‘ Gómez, estrella en el pasado de la Atalanta, dejó el club de Bérgamo en enero de forma traumática para marcharse al Sevilla. En el trasfondo, una discusión con Gasperini y una relación rota que nunca se terminó de aclarar. Ahora, el argentino ha concedido una entrevista a La Nación para contar su versión de los hechos.
Esto es lo que cuenta:
“Me tuve que ir del club. Me esperaba una disculpa del técnico que jamás llegó. Yo me equivoqué en algo, lo asumo, porque en un partido de Champions contra un equipo de Dinamarca, el Midtjylland, lo desobedecí en una indicación táctica. Faltaban diez minutos para que termine el primer tiempo y me pidió que juegue por la derecha, mientras que yo estaba jugando muy bien por la izquierda. Y le dije que no. Imagínate, haberle respondido eso, en medio del partido, hoy, con las cámaras…, estuvo perfecto que se enojara. Ahí ya supe que en el entretiempo me iba a sacar, y así fue. Pero en el vestuario del entretiempo se sobrepasó, cruzó los límites e intentó agredirme físicamente».
Luego, al ser preguntado con más ahínco por el periodista, responde:
«¿Me quiso pegar? Sí. Y ahí dije basta. Uno puede discutir, ok, pero cuando hay una agresión física ya es intolerable. Entonces pedí una reunión con el presidente del club [Antonio Percassi] y le dije que no tenía problemas en continuar, aceptando que me había equivocado: como capitán no me había comportado bien, había sido un mal ejemplo desobedeciendo al técnico. Pero le dije al presidente que yo necesitaba una disculpa de Gasperini. Y le dije, también, que entendía que el presidente ni podía aceptar que el técnico hubiese intentado agredir a un jugador. Bien. Al día siguiente hubo una reunión de todo el plantel. Yo avancé y le pedí disculpas al entrenador y a mis compañeros por lo que había pasado. Y no recibí ninguna disculpa del técnico. Entonces, ¿cómo había que entenderlo? ¿Lo que había hecho yo estaba mal y lo que había hecho él estaba bien? Ahí empezó todo. Después de unos días le comuniqué al presidente que no quería seguir en Atalanta trabajando con Gasperini. El presidente me comunicó que no me iba a dejar salir, que no me iba a liberar. Comenzó el tira y afloje y los costos fueron para mí: me separaron del plantel y terminé entrenándome solo con la reserva. ¿El peor momento? Todos. Fue feo porque después de 7 años me dejaron tirado, después de todo lo que le di al club. Se comportaron mal. Que el presidente no haya tenido los huevos de pedirle al técnico que simplemente me pidiera disculpas…, con eso se terminaba todo. Seguíamos los dos. Pero se comportaron muy mal conmigo. Porque eso no fue todo, ya que a partir de ahí me cerraron las puertas del fútbol italiano: no me querían dar a ninguno de los grandes de Italia porque decían que iban a reforzar a un rival directo. Sí llegaban ofertas de Arabia y de Estados Unidos y me querían mandar para ahí…, siendo el mejor centrocampista de la Serie A. Raro, se estaban comportando mal. Gracias a Dios apareció el Sevilla, porque yo lo único que quería era seguir compitiendo en un gran nivel para poder estar en la Copa América. Esa era mi obsesión. Por eso esperé y esperé hasta el final, y por suerte apareció el Sevilla».
Además, habla de la decepción sentida por la actitud del club hacia él:
«Quien más me desilusionó fue la propiedad, los dueños del club. Después de tantos años, después de la relación de confianza que teníamos…, mis hijos iban al colegio con los hijos de ellos, compartíamos un montón de cosas… Que me hayan tirado a la basura como me tiraron fue la parte que más me dolió. Después, uno puede tener diferencias con el técnico, y te diría que es casi normal, porque pasa, claro que pasa. Te podés pelear, como en cualquier trabajo. Pero el trato que recibí de la propiedad me dolió muchísimo. Yo creo que fue una cuestión económica. Ellos saben que Gasperini es uno de los mejores entrenadores de Europa, saben que su trabajo pone en valor al plantel y les hace vender jugadores. Fue un tema económico, y está perfecto; prefirieron seguir con él porque saben que le hace ganar mucho dinero al club. Prefirieron eso».