El Inter de Milán se jugaba mucho ante el Sheriff Tiraspol. Los interistas tenían la oportunidad de acercarse a pasar a octavos de final tras varias decepciones en el pasado con Luciano Spalletti y Antonio Conte en el banquillo. Por lo que no se podía perdonar ante el Sheriff Tiraspol en su visita a Moldavia. Y no se perdonó.
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Cala il sipario 🏟️
Quarto atto a tinte nerazzurre. ⚫🔵#SheriffInter 1️⃣ – 3️⃣#UCL #ForzaInter pic.twitter.com/gel6HIDUJ9— Inter (@Inter) November 3, 2021
Inzaghi salía con algunas novedades en el once: volvía De Vrij al centro de la defensa tras descansar en liga, Dimarco fue titular en el carril zurdo, Darmian le ganó la partida a Dumfries, Arturo Vidal complementó el trivote y Lautaro Martínez volvía al lado de Edin Dzeko. Enfrente, el Sheriff recuperó a dos hombres importantes que no habían estado en la ida: Giorgos Athanasiadis y Jasurbek Yahshiboev.
El Inter agarró el control del partido desde el minuto uno y no lo soltaría hasta el final. Los hombres de Simone Inzaghi dominaban dirigidos por De Vrij, Brozovic y Bastoni, buscaban jugar por fuera, sobre todo con Dimarco por la izquierda, y tanto Lautaro como Dzeko se movían continuamente para buscar hacer daño a los moldavos. Pero pese al dominio y a los 13 disparos, no llegaba el gol y comenzaban a aparecer los fantasmas del pasado en los italianos.
Fantasmas del pasado que se corregirían pronto en la segunda mitad. Y es que a los nueve minutos de arrancar el segundo tiempo, Marcelo Brozovic cogió un balón suelto en la frontal del área, hizo que iba a disparar con la izquierda, dejó a dos rivales en el suelo mientras recortaba y disparó con la derecha a gol para poner el 0-1.
A partir del primer gol del partido se le cayó el plan al Sheriff. Los locales comenzaron a abrirse y el Inter lo aprovecharía para hacer el 0-2 a balón parado, Skriniar remató solo hasta tres veces dentro del área tras un córner, y para poner el 0-3 en un error de Gustavo Dulanto que aprovecharía Alexis Sánchez. El Sheriff empujó hasta el final con un tanto de Adama Traoré, que puso el 1-3, pero ya era tarde.
Esta victoria deja al Inter como segundo de grupo y con siete puntos tras ganarle el doble enfrentamiento al Sheriff Tiraspol y pasa a depender de sí mismo y dejar prácticamente eliminado al Shakhtar, el gran rival directo a priori. Ahora tendrán «solo» que sumar los mismos puntos o más que los moldavos en sus enfrentamientos contra el Real Madrid y contra el Shakhtar.