La Roma encajó una derrota durísima ante el Spezia en Coppa Italia que le dejó sin pasar a la siguiente fase con 2-4 perdiendo en casa, con nueve jugadores y con un error que la Roma cometió a la hora de hacer los cambios y que le dejaba eliminada igualmente. Todo eso sumado a la derrota contra la Lazio, su máximo rival, por 3-0 y que no gana ningún partido contra equipos del TOP-10, la situación preocupa.
Por ello, tras el encuentro, los Friedkin, propietarios del club, Tiago Pinto, CEO de la Roma, y Paulo Fonseca, su entrenador, se reunieron al término del encuentro. El técnico fue el primero que abandonó el estadio y varias horas después lo hicieron los dirigentes, pero todo sería porque peligra el puesto de Paulo Fonseca. El técnico no va a ser despedido pero su revancha contra el Spezia podría ser clave para mantener su puesto. Aún así el técnico quitó hierro al asunto en rueda de prensa: «Desde el primer día ha habido rumores respecto a mi continuidad».